Este proyecto busca fomentar la inclusión y el talento de personas con condiciones como el autismo y el síndrome de Asperger, brindándoles la oportunidad de expresarse a través de la música.

La música no conoce límites y la Orquesta Filarmónica de Medellín lo demuestra con su innovador programa “Soy Músico”, una iniciativa que abre las puertas del mundo sinfónico a jóvenes neurodivergentes. Este proyecto busca fomentar la inclusión y el talento de personas con condiciones como el autismo y el síndrome de Asperger, brindándoles la oportunidad de expresarse a través de la música.

“Soy Músico” nace con la intención de demostrar que la música puede ser un lenguaje universal y una herramienta de desarrollo para todos. Bajo la dirección de un equipo especializado, los jóvenes participantes reciben formación en diferentes instrumentos, integración en ensambles y oportunidades para presentarse en escenarios prestigiosos de la ciudad.

Medellín como ejemplo de inclusión cultural

Gracias a este tipo de iniciativas, Medellín sigue posicionándose como una ciudad que apuesta por la diversidad y la inclusión en el ámbito artístico. La Orquesta Filarmónica ha logrado consolidar un espacio donde la música se convierte en una herramienta terapéutica y de empoderamiento para estos jóvenes talentos.

Este programa no solo impacta a los participantes, sino que también sensibiliza a la comunidad sobre la importancia de abrir espacios accesibles en el mundo cultural. Con el apoyo de diferentes entidades, “Soy Músico” sigue creciendo y espera inspirar a más orquestas en Colombia y el mundo a adoptar modelos inclusivos.

La música es para todos y en Medellín está más viva que nunca. ¿Qué opinas de este tipo de iniciativas? Coméntanos en @laxmedellin.